El comienzo del Adiós

Qué difícil es sentirse plenamente feliz, muchas veces no encuentro mi felicidad plena, tan siquiera cuando duermo. Muchas veces sueño despierta de como seria esta vida si tu estuvieras en ella, si me vieras reír, llorar, bailar, gritar, saltar, cantar y escribir; te dieras cuenta de que la mayoría del tiempo lo hago pensando en ti. Estas en la mayoría de mis pensamientos y no puedo sacarte de ellos. Extraño tu olor, tus caricias y cuando me dabas un beso en la frente (esos que tanto me gustan). Me doy cuenta de que por más que extraño todas esas cosas no quiero volver a tenerlas de tu parte porque sé que no me hacían bien, sufriendo digo esto que tanto duele en el alma, algo que tanto quise, pero no era feliz todo el tiempo. No supiste ver lo grande que era y por más que extrañe todas esas cosas, mientras estaba contigo más me hundía en el dolor y en el sufrimiento de lo que pensé que podíamos ser. Duele el alma no tener ese amor que tanto quiero, pero ahora no lo quiero de ti, solo quiero sentirlo de alguien más. Te ame con mi alma entera, pero ahora canto a todo pulmón lo feliz que estoy comenzando a ser. Después de la tormenta viene la calma y ahora la calma está comenzando a llegar. Con una lagrima me despido de este sufrimiento que tanto me causaste, y de los buenos recuerdos me arreguindaré cuando piense en ti.

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